En VIDA Y SONRISA ahora contamos con el nuevo láser de tecnología Q-Switch picosegundos. Esta nueva generación de láseres Q-Switch tienen la capacidad de ofrecer múltiples longitudes de onda, convirtiéndose por tanto en el tratamiento ideal para el manejo de todo tipo de pieles y diversas aplicaciones clínicas.

Esta novedosa tecnología ofrece la posibilidad al paciente de eliminar definitivamente un tatuaje de forma segura, eficaz y en pocas sesiones. Todo esto es posible gracias a que contiene diferentes longitudes de onda específicas para cada uno de los colores que pueda tener un tatuaje. Durante su aplicación, el pigmento absorbe la luz del láser y éste se fragmenta en diminutas partículas que son eliminadas por mecanismos fisiológicos.

Hasta los tatuajes más difíciles y de cualquier tamaño pueden ser eliminados con este láser debido a que permite combinar diferentes fuentes de luz.

La piel puede mostrar una decoloración y el área alrededor del tatuaje puede quedar enrojecida o inflamada después del procedimiento, esta reacción desaparece en un intervalo de tiempo muy breve. Los resultados, de una única sesión, serán visibles entre los 4 y 6 semanas.

El número de sesiones varía en función del tamaño, localización, profundidad y el color. Pueden requerirse de 5 a 8 sesiones. Estas sesiones deben espaciarse en un intervalo de 4 a 8 semanas.

No obstante, para determinar el número de sesiones se toman en cuenta los siguientes criterios concretos:

• - Tipo de piel: las pieles oscuras requieren más tratamientos
• - Colores del tatuaje: los de color negro son los más fácil de eliminar. Los multicolores requieren más tiempo.
• - Cantidad de tinta: medida tanto por la densidad del tatuaje como si se hizo por un profesional o no.
• - Capas: si un tatuaje fue cubierto por otro se necesitarán más sesiones.
• - Cicatrices: si existe una cicatriz en el tatuaje dificultará el tratamiento, requiriendo un número más amplio de sesiones.