Los nevus, o lunares son originados a partir de melanocitos o células pigmentarias de la piel y pueden aparecer desde el nacimiento (nevus congénitos) o en el transcurso de la vida (nevus adquiridos).

Algunos nevus presentan cambios funcionales esperados, como aumento de tamaño durante la pubertad y el embarazo, y oscurecimiento con la exposición al sol. Los signos de alarma para tener en cuenta en caso de sospecha de malignidad, son cambios repentinos en el tamaño, el color, los bordes, la elevación y la aparición de síntomas como picazón, dolor o sangrado, por lo cual en estos casos se debe consultar inmediatamente al dermatólogo.

En Vida y Sonrisa contamos con dermatoscopía, el examen más específico para el estudio de los nevus, es un método sencillo, rápido, e indoloro; consiste en una  técnica de microscopía de superficie sobre la piel que permite diferenciar lesiones pigmentadas benignas y malignas con mayor precisión que el examen clínico.

En caso de requerir resección de nevus te ofrecemos el láser CO2 de última tecnología, que consiste en un procedimiento muy preciso con excelentes resultados estéticos; luego de una valoración inicial que se realiza para definir la indicación de tratamiento más adecuada.